Jerry Yang y David Filo eran dos jóvenes recientemente graduados de la Universidad de Stanford, cuando en plena búsqueda de qué podrían hacer, se pasaban muchas horas del día navegando en Internet, en una pequeña oficina ubicada en una casa rodante, estacionada en la parte de atrás del departamento de informática de su Universidad. Para esos días de 1994, se había lanzado recientemente el Mosaic Communications, de Jim Clark y Marc Andreessen, y Yang y Filo decidieron organizar las páginas de internet que iban visitando, en un directorio organizado por categorías como Noticias, Salud, Ciencia, Artes, Recreación, Negocios y Economía.
El secreto fue crear el directorio que clasificaba información que podría llevar horas encontrarla y, además, hacerlo en el momento justo. El primer directorio era muy sencillo, realizado en texto, sin imágenes llamativas ni anuncios y se llamó: “Vía rápida de Jerry a Mosaic”. Con el tiempo quisieron desarrollar y modernizar su directorio, presentando otros con el nombre de «Guía de Jerry Yang a la WWW» y «Guía de Jerry y Dave a la World Wide Web», pero finalmente decidieron unificar todas estas guías y así dieron nacimiento a Yahoo!
Inicialmente, tenían un promedio de visitas de dos mil entradas por día, pero a fines de 1994 ya contaban con cien mil visitas diarias. Yahoo! se disipó por el mundo como una plaga, pero esta vez era algo útil para la humanidad. El punto máximo llegó en 1998, cuando el contador marcó las 167 millones de visitas por día.
En el año 1996, Yahoo! se convirtió en un negocio con su arribo a la bolsa, el cual fue un festín para los inversionistas, que se abalanzaron por la compra de acciones de la empresa. Al abrir el mercado comenzó con a 13 dólares por cada acción, llegó a un pico de 43 y cerró, finalmente, en 35 dólares cada una. Este ritmo compulsivo convirtió a Yahoo! en una empresa con un valor de 849 millones de dólares en solo trece meses de participación en la bolsa.
Durante años, Jerry y Dave estuvieron aterrorizados de que Microsoft comience la batalla contra ellos en el mercado de los portales en línea, porque sabían que podía suceder en cualquier momento. Por este miedo, se supone que Yahoo! nunca quiso participar de NOISE, el grupo de empresas que se unen con el fin de que Microsoft caiga y aún así, siempre logró esquivar los posibles ataques de la compañía de Bill Gates, uno de los hombres más ricos del mundo.
