Iberdrola, una de las empresas más internacionalizadas del mercado español, tiene grandes intereses comerciales en Reino Unido. Fue de las que sufrió un vaivén más intenso en el Brexit, del que parece felizmente recuperada. Sin embargo, se acercan las elecciones británicas y el sector energético está en boca de todos los candidatos, desde la señora May que asegura que estas empresas se están forrando a costa de los ciudadanos hasta Corbyn, que incluso ha hablado de expropiaciones.
Estos rumores pueden afectar de forma negativa a la valoración de Iberdrola, rebajando su cotización. Lo que puede ser bueno para quienes quieran entrar en una de las empresas punteras españolas, puede ser negativo para quienes estén en ella pensando en vender a corto o medio plazo. Habrá que estar muy atentos a como evoluciona la campaña electoral y ver si afecta de forma relevante tanto cotilleo sobre el cambio de legislación energética.