El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha nombrado un nuevo gabinete y ha reemplazado a su vicepresidente en funciones en un movimiento que según dicen los analistas, tiene pocas esperanzas de dar la vuelta a la mala economía del país, un país rico en petróleo.
Entre las posiciones clave, el Sr. Maduro nombró a Luis Salas, profesor de economía en la Universidad de la izquierda joven Bolivariana como su nuevo ministro de Economía. Luis Salas siempre ha culpado al capitalismo de los problemas de Venezuela.
El Profesor Rodolfo Medina fue nombrado ministro de Finanzas y Jesús Faria, ex legislador y líder del Partido Comunista, se convirtió en el ministro a cargo de la inversión extranjera.
El Sr. Maduro nombró a un aliado socialista de toda la vida, Aristóbulo Istúriz, gobernador del rico estado petrolero de Anzoátegui, como su nuevo vicepresidente. El Sr. Istúriz, es el primer afro-caribeño que ha llegado a un puesto de este tipo en Venezuela, sustituyendo a Jorge Arreaza.
«Este gabinete es un desastre«, dijo el analista político con sede en Caracas, Dimitris Pantoulas. «Tienen un ministro de Economía que no cree en el sector privado y por otro lado dicen que les interesa la inversión extranjera. Esta política tan contradictoria, no nos lleva a ninguna parte«.
El Sr. Maduro a través de este cambio de gabinete, piensa que podrá rescatar la economía de Venezuela, que según el Fondo Monetario Internacional, podría contraerse en un 6% en este 2016 después de que la economía se haya reducido en aproximadamente un 10% en el2015.
Según Nicolás Maduro, la culpa de los males de su país es la llamada guerra económica que se está librando por sus enemigos, tanto externamente como internamente. También culpó a la caída del precio del petróleo del año pasado.
Nicolás Maduro también ha creado nuevos ministerios, incluyendo uno para «Agricultura Urbana» y otra para «Pesca».