“Gracias” a la crisis, en España tenemos la tasa más baja de toda Europa en lo que a trabajadores mayores se refiere.
A diferencia de lo que ha ocurrido en otras partes de Europa, la tasa de trabajadores mayores que continúan trabajando se ha reducido de manera muy simbólica desde el 2007, que fue el año en el que comenzó la crisis económica en España.
La tasa de trabajadores mayores en activo más baja de toda Europa
En este grupo de trabajadores podemos meter a aquellas personas trabajadoras con edades comprendidas entre los 55 a los 64 años. Detrás de estas cifras, aparece o podemos decir, reaparece el debate sobre las reformas que están aún pendientes a un nivel económico, por temas como una elevada productividad, incentivar la natalidad y la más importante, por una nueva revisión del sistema de pensiones.
El Instituto de Estudios Económicos publicó a raíz de los datos sacados en Eurostat, que el porcentaje de trabajadores mayores se ha visto reducido en dos décimas en España en el intervalo de los años 2007 y 2014, situándose en un 44,3%.
Lo más curioso del informe y de las cifras obtenidas, es que el porcentaje paso de un 44,5% a un 51,8% de media en el resto de países europeo, alejando a España del altísimo 74% de Suecia, del 65,6% de Alemania o del 64% que ostenta Estonia.
Almudena Smur, quien es coordinadora del Servicio de Estudios del IEE, ha comentado que el hándicap de España era que el país ya partía de una tasa de actividad reducida. Tan solo un 56% de la población está en edad de trabajar, un porcentaje que es muy escaso si lo comparamos con ciudades como Alemania, que cuenta con un 74%, Dinamarca, que cuenta con un 73 % o nuestro país vecino Francia, que cuenta con un 64%.
¿La solución? Un cambio de estrategias dentro de la Unión Europea.