La idea tradicional de un banco y sus múltiples propósitos pueden quedar atrás debido a una inmersión que los gigantes de la tecnología desean hacer.
Apple ha permitido desde hace mucho tiempo acumular dinero con la compra de tarjetas, enlazar las cuentas con tarjetas de débito o crédito, y hacer compras con los fondos al alcance; Paypal es una plataforma virtual que permite manejar dinero para transacciones casi normales sin necesidad de una cuenta bancaria; las “criptodivisas” del estilo bitcoin se han vuelto populares en la red, sin necesidad de intermediarios físicos u oficinas centrales.
Todos estos ejemplos son referencias de cómo los servicios básicos de un banco han sido aprovechados por individuos y microempresas a pasos muy ágiles; han aprendido rápidamente de sus ofertas limitadas y buscan ampliar sus horizontes con una nueva oferta de herramientas.
Quiénes están en la mira de la nueva generación de financiacion
Facebook, Google y Apple, las tres empresas más grandes del sector tecnológico e informático, son quienes han trabajado en la materia gracias al alcance de sus servicios y la cobertura que pueden ofrecer a sus usuarios:
- Facebook cuenta con una licencia de operaciones menores (transacciones, depósitos y atesoramiento) en Irlanda, una movilidad de capital entre Estados Unidos y Reino Unido; pero no ha hecho más al respecto.
- Apple ha deseado dar un paso mayor con Apple Pay como medio de pago en dispositivos móviles y depender menos de sus tarjetas. Pero los ánimos se han desplomado.
- Google ha solidificado sus pretensiones con Android Pay, Google Wallet, Google Venture, Google Capital; sin mencionar su herramienta financiera de Google Analytics. Ha obtenido autorización para movilizar capital entre EUA y RU, ofrece préstamos y créditos a pequeñas entidades que buscan espacios publicitarios, y ha firmado acuerdos con entidades virtuales con su mismo fin
Las expectativas titubean, pero la intención se ha declarado.