Prestamistas de la UE han estado trabajando en un plan para ofrecer al país cierto alivio en la deuda gradual con la condición de que adopten reformas adicionales para el año 2022.
Los prestamistas permitirían inicialmente una tasa de interés más bajo y unos plazos más largos para así poder pagar la deuda de Grecia que alcanza ya los 316 millones de euros, unos 352 millones de dólares. En una etapa posterior, no hubo conversaciones sobre la vinculación de pagos de la deuda al crecimiento económico proporcionado en Atenas y es por eso que se implementaran medidas que se acordaran con los acreedores para el 2022.
Este es un plan que se ha discutido entre los funcionarios de la Comisión Europea, el fondo de rescate de la zona euro y el Banco Central Europeo.
Los prestamistas han hablado públicamente sobre la concesión de alivio de la deuda en las reformas de condiciones.
El jueves, Jeroen Dijsselbloem, presidente del grupo de ministros de Finanzas de la zona euro, había dicho que estaban preocupados con la calidad de las reformas que Grecia había prometido a cambio de su rescate.
Las negociaciones entre los jefes de la misión de la UE / FMI revisaran el progreso del país en una revisión de las pensiones, las metas fiscales y el manejo de malos préstamos.
No estaba claro si los prestamistas volverían o no a Atenas. Sin una primera evaluación positiva de las reformas, Grecia no puede iniciar las conversaciones de ayuda.
Después de una cumbre de la UE que el viernes llegó a un acuerdo para ayudar a mantener a Gran Bretaña en el bloque y hacer frente a la crisis migratoria de la región, el primer ministro de Grecia Alexis Tsipras dijo que todos los socios de la UE acordaron la revisión necesaria para concluirla tan pronto como sea posible.
El ministro de Finanzas de Grecia sugirió el sábado que las diferencias entre los socios de la UE y el FMI sobre el programa de rescate estaba socavando los esfuerzos del gobierno para ayudar a la economía griega a recuperarse después de años de recesión.
